Cuanto se parecían a nosotros nuestros antepasados es la respuesta que están buscando investigadores de la Universidad de Dundee, Escocia. Los científicos Carolin Erolin y el Dr. Christopher Rynn, expertos en visualización anatómica 3D pueden reconstruir la apariencia de los difuntos basándose en sus huesos.
La reconstrucción arqueológica fácil es altamente demandada entre los museos y los directores de documentales, como es el caso de la cara de Thankerton Man, la cual fue reconstruida por el museo Biggar and Upper Clydesdale de Escocia. El cráneo fue encontrado en 1970 en el pueblo de Thankerton y se estima que está datado entre 2460 AC y 2140 AC con una edad comprendida entre 18 y 25 años.
La actividad de Caroline y Christopher no se limita sólo a la reconstrucción facial, actualmente también trabajan en el Centro para Anatomía e Identificación Humana (CAHID) en estudios médicos y forenses, realizando identificaciones faciales que proporcionan pruebas para el sistema de justicia de UK.
El Centro ha adquirido recientemente un escáner ARTEC EVA, como parte de la actualización de sus métodos para la generación de imágenes.
El proceso de reconstrucción implica la generación de la anatomía facial a partir del cráneo. Esto se puede crear con arcilla o modelándolo de manera digital a partir de un escaneo. Hay muchas ventajas a la hora de trabajar con un escaneo, ya que no se daña el cráneo y una vez digitalizado, se pueden observar las distintas capas de la reconstrucción.
Otro proyecto en el cual está trabajando el CAHID es en la digitalización de la colección D´Arcy Thompson Zoology, compuesta por fascinantes especímenes de todo el mundo. El objetivo de dicho trabajo es hacer que dicha colección sea más accesible para todo el mundo, incluyendo el público general, los estudiantes y los investigadores. Una vez escaneados se podrá crear un museo virtual 3D donde se podrán observar los especímenes e interactuar con ellos. Algunos de ellos también se imprimirán en 3D para que puedan ser manejados en las jornadas de puertas abiertas y llevados a los colegios.
La colección Scheuer está compuesta por más 100 ejemplares adultos, los cuales son muy frágiles y complicados de transportar. Gracias a la digitalización, podrán ser accesibles para los estudiantes para su visualización online y también impresos en 3d para su uso en las aulas.